En sus primeras consultas le fue transmitido que el barco iba en lastre y que no existía peligro de contaminación. Ha agradecido la oportuna e inmediata información de Capitanía Marítima, Guardia Civil, Autoridad Portuaria, Coordinación de la Administración General del Estado en la comarca y al subdelegado del Gobierno. No obstante, y con independencia de los trabajos que se han llevado a cabo para liberarlo de la inmovilidad, ha comentado la primera autoridad municipal que “antes o después una tragedia marítima va a ocurrir en la bahía si no se toman medidas efectivas”.
Considera el alcalde que pueden ser acertadas y ajustadas a lo establecido las acciones tomadas por la Capitanía Marítima tendentes a redactar un expediente sancionador y a pedir una fianza por las posibles negligencias del mando de este buque, “pero son medidas que se toman después de que acontezca algo. Mi interés está en que igualmente se lleven a cabo inspecciones y órdenes expresas a los buques que aquí fondean sobre todo cuando existe mal tiempo. Eso echo en falta y de no corregirse nos llevaremos un día una sorpresa. Es imposible de entender que cada vez que haya temporal exista un accidente marítimo”.
Abunda en sus consideraciones el alcalde recordando que “cada temporal nos trae un susto mayúsculo. Afortunadamente el de hoy puede considerarse así, pero atrás en el tiempo están los casos del New Flame, Sierra Nava, Tawe, Fedra y el Ropax 1. Esto no puede continuar por más tiempo. Este Ayuntamiento ha venido alertando de todos estos problemas y continúan sin que parezca que tenga solución alguna. Me pregunto si existe autoridad capaz de dar solución a estos problemas”.