Colorido, diversión y alegría, esa fue la nota dominante en la tarde de ayer. La cabalgata de feria fue puntual una vez más con los más pequeños de la Villa. Los miles de niños acompañados de sus padres y abuelos se lo pasaron en grande con los componentes de la comitiva, que derrocharon simpatía a lo largo del recorrido.
La cabalgata partió de la barriada EL Palmarillo, en la confluencia del bar Sevillita, para recorrer la avenida alcalde Juan Rodríguez hasta la rotonda del Toro, donde se ubica la entrada al recinto ferial.
Una vez en el ferial se procedió al encendido del alumbrado. Posteriormente se dio el comienzo oficial de la Feria en honor del patrón de la villa, San Isidro Labrador con el baile de apertura.
Ver Foto Galería: Reportaje F. Álvarez