.El diputado nacional del Partido Popular José Ignacio Landaluce, ha mostrado su preocupación por el rumbo que está tomando el Gobierno español en torno a las relaciones con el Reino Unido y Gibraltar para abordar el asunto de la soberanía de la colonia británica.
Lo más preocupante, asegura el diputado, es la postura que el ejecutivo de Rodríguez Zapatero está adoptando, una postura que en nada favorece los intereses de nuestro país y que, por el contrario, está propiciando que Gibraltar siga sumando puntos en sus pretensiones soberanistas en detrimento de España, cuyo Gobierno, pese a haber manifestado su intención de no renunciar a la soberanía, no ha dado muestras de querer hacer fehaciente esta voluntad.
El ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, sigue rindiendo pleitesía a la colonia británica, y mientras esto ocurre Gibraltar sigue presionando a España con gestos tan desafortunados como la detención de guardias civiles o la prohibición expresa de que las embarcaciones de la Benemérita se acerquen a las inmediaciones del peñón.
Esta postura dócil de la diplomacia española contrasta con la falta de aplicación del dictamen del Congreso de los Diputados tras la aprobación, el pasado 11 de marzo, cuando se aprobó una Proposición No de Ley que instaba al ejecutivo a retomar las negociaciones sobre las cuestiones de soberanía de Gibraltar, de acuerdo con las resoluciones y decisiones pertinentes de la Naciones Unidas, a la vez que pedía al Gobierno que presentara, conjuntamente con el Gobierno del Reino Unido, cada año en la Asamblea General de Naciones Unidas la decisión de consenso en la que se insta a ambas partes a continuar las negociaciones previstas para la solución definitiva del contencioso de Gibraltar.
Esta PNL fue auspiciada, presentada y defendida por el propio Landaluce en nombre del Grupo Popular, y el interés del Partido Socialista se tradujo en la presentación de una propuesta similar, con el único interés de quitar el protagonismo a la iniciativa incoada por el Partido Popular.
Lo único cierto, asegura Landaluce, es que ni una ni otra se han visto traducidas a actuaciones concretas ni hay visos de que vayan a adoptarse medidas para dar cumplimiento al mandato de la Proposición No de Ley, y las cosas no sólo no han mejorado, sino que han ido a peor.