José Salguero Duarte | Escritor y Analista
El título de esta tribuna: Lo siento, Luis, no volverá a suceder. Le podría venir muy bien al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, para decírselo en una presunta reunión secreta que mantenga con su extesorero Luis Bárcenas, tras haber sido excarcelado el pasado jueves 22, una vez que su familia depositó en el juzgado, la fianza impuesta de 200.000 euros para su puesta en libertad, después de permanecer preventivamente enrejado 19 meses, por ser una presunta señoría corrupta del PP.
Debo recordar que, Bárcenas, fue uno de los presuntos barones mafiosos políticos del PP de cuello blanco y manga ancha, que fue encarcelado al existir presuntos indicios de haber cometido ciertos delitos… Encontrándosele en paraísos fiscales una fortuna de unos 48 millones de euros, procedente parte de los mismos, de presuntas donaciones que recibió el PP… Preguntándome, si Bárcenas se llevó presuntamente esa cantidad, ¿qué volumen de dinero se movía en la presunta contabilidad o caja B del PP?
La cuestión es que, más de uno y dos del PP, han echado ‘balones fuera’ durante este tiempo, culpando a Bárcenas de esa presunta práctica mafiosa propia de bandas criminales. Pero ahora se atarán los machos porque Bárcenas, siguiendo los consejos de su presidente Mariano Rajoy que le dijo “Luis, lo siento. Sé fuerte. Mañana te llamaré”. Ha aguantado determinadas presuntas ‘embestidas’ cobardes de algunos de sus compañeros de partido y viajes. Desconociendo, si dicha llamada se la llegó a realizar Rajoy. Aunque, algún recadito, supongo, que le habrá mandado para intentar salvar ‘sus muebles’. Porque lo que ha quedado más que presuntamente probado es que, Rajoy “lo arrojó a los pies de los caballos”, al poco tiempo de saltar a la opinión pública, tan repugnante escándalo de la presunta financiación ilegal del PP.
Consecuentemente, tras la puesta en libertad de Bárcenas, volviendo a su casa no como el lobo del turrón sino al inicio de la campaña electoral. El PP sigue moviendo piezas ante esta ‘bomba de relojería’ que tiene presuntamente incrustada en el núcleo duro y blando de su ejecutiva nacional. Quedando presuntamente claro que, el PP, se ha financiado ilegalmente con dinero negro, según informes aparecidos de entes oficiales y a través de las reiteradas declaraciones efectuadas por su extesorero Luis Bárcenas, sobre la existencia de “una contabilidad paralela en el partido durante años”. Declarando, además, Bárcenas el viernes tras su paso por el juzgado, donde deberá comparecer cada lunes, miércoles y viernes. Que “Mariano Rajoy conocía la existencia de la caja B desde el principio. Y el que se ha beneficiado de esa contabilidad es el partido”. Dejando claro también que, “él asume su responsabilidad, pero los demás deben asumir las suyas”.
Esas afirmaciones son demoledoras para el Partido Popular. Por lo que, para dignificar a sus siglas, gaviota y militantes, con carácter de urgencias y sin demora alguna de tiempo, si es falso lo declarado por Bárcenas, debería presentar el PP la correspondiente querella contra él. De lo contrario, toda la cúpula del PP con su presidente Rajoy a la cabeza, deberían presentar su dimisión de todos los cargos públicos que ostentan. Porque esta situación es calamitosa para ellos y para la salud democrática española. Debiendo tener claro esas excelencias políticas que, cualquier cargo público debería abandonar los cargos políticos que ostenten, nada más caer sobre ellos sospechas o imputaciones debidamente probadas y documentadas de corruptelas, abusos de poder, cohecho, malversación de caudales, tráfico de influencias…
Tengo claro que, Rajoy, especialmente en estos tres últimos años, ha demostrado ser presuntamente un personaje carente de decencia política, al mentir de forma reiterada. No siéndome extraño dicho vergonzoso comportamiento. Por lo que, desde hace años lo considero un personaje despojado de los valores básicos, como para dirigir a un país como el nuestro. Pero como las Españas presuntamente han sido y son gobernadas por determinados presuntos nefastos políticos. Rajoy puede ser presuntamente, por sus hechos, más de lo mismo. Aunque, se espera que pronto pierda los privilegios que posee, si es cercado democráticamente por sus presuntas fechorías cometidas, cuando el pueblo se conciencie, de una vez por todas, que hay que botarlo del poder.
El PP, para finalizar esta tribuna, durante este fin de semana del 23 al 25 de enero de 2015, celebró su Convención Nacional en Madrid. En la que, supongo, analizaron las grietas electorales y de otras índoles producidas por las declaraciones… de Bárcenas. Conclave en el que, además, marcarían las directrices a seguir de cara a los slogans a difundir en los comicios electorales próximos.
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