Rafael Fenoy Rico | Secretario de Comunicación Educación de la Confederación General del Trabajo (CGT)
Se ha celebrado en Madrid los días 9 y 10 de julio de 2014 un Congreso con ese título, donde se presentaron los resultados de las pruebas PISA 2012 que pretende evaluar la competencia financiera del alumnado de 15 años y que se orientan a elaborar una evaluación de la competencia financiera de ámbito internacional. Tomando como base el documento “marcos y pruebas de evaluación PISA 2012 Competencia Financiera” que ya en su introducción afirma como la preocupación de los países con economías desarrolladas y emergentes ha ido en aumento por el nivel de competencia financiera que tienen sus ciudadanos. Debiéndose esto, y aquí es donde comienza la alarma, “a los recortes en los sistemas de ayudas públicas y privadas, al cambio de los perfiles demográficos, incluido el envejecimiento de la población, y a las diversas transformaciones del mercado financiero” Sigue el texto asombrando al lector cuando afirma que también ha incrementado dicha preocupación por el “difícil contexto económico y financiero, al reconocer que la falta de competencia financiera era uno de los factores que favorecían la toma de decisiones financieras mal fundadas, las cuales, a su vez, podían tener tremendos efectos indirectos negativos”. Un sucinto análisis de este entramado de conceptos desvela varias intenciones: La primera que hay que preparar a la infancia y a la juventud, no para evitar “los recortes en los sistemas de ayudas públicas” para mantener derechos sociales esenciales. La segunda es que aumentar la esperanza de vida es “un problema” ya que entiende el documento que la difícil situación la provoca también el “cambio de los perfiles demográficos, incluido el envejecimiento de la población”. Y por último que las “diversas transformaciones del mercado financiero”, que han generado gravísimos problemas en las finanzas de los estados, transfiriendo miles de millones de euros desde las arcas públicas a las cajas fuertes de los Bancos en peligro de quiebra, se deben a la “falta de competencia financiera… que favorecían la toma de decisiones financieras mal fundadas, las cuales, a su vez, podían tener tremendos efectos indirectos negativos”.
¿Estos tremendos y negativos efectos estarían relacionados con llamadas “preferentes” o las hipotecas basura….? Un entramado de timos en cadena nunca antes padecido por la humanidad, desde que los primeros banqueros lijando los bordes de las monedas de oro que los clientes dejaban en depósito, para de esta forma quedarse con el polvo de oro, para al devolverlas contarle al estafado cliente, que el desgaste que observara era debido al “uso” de la moneda.
Asombra que en este documento (gubernamental) se fundamente la necesidad de una Educación Financiera en “el recorte de los sistemas de ayudas públicas”. Ya que son los gobiernos los responsables directos de estos recortes, de las privatizaciones de todo lo público que puede generar beneficios. Y tanto las políticas demográficas, como la regulación de los sistemas financieros, están dentro de las competencias de los estados el ordenar estos mercados, que nunca deberían funcionar contra el interés general, sino todo lo contrario.
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