Redacción | Los Barrios
Los enseres, los útiles y la maquinaria que formaron parte de los activos de la fábrica de anisados Cózar, comprada por el Ayuntamiento a través de la desaparecida empresa municipal Destilería Villa de Los Barrios, S.L., permanecen arrinconados y abandonados a la intemperie en el complejo deportivo San Rafael desde no se sabe cuándo. Esta es la curiosa forma de proteger y defender el patrimonio que ha tenido y tiene el equipo de gobierno de Jorge Romero.
La mencionada fábrica de anisados, empresa que data de 1850 y que perteneció durante generaciones a la familia Cózar, fue adquirida por el Ayuntamiento de Los Barrios a través de la citada sociedad pública municipal en 2006 con el fin de evitar que esta destilería, por su antigüedad, su solera y su significación histórica, terminara desapareciendo. La compra se llevó a cabo tras un acuerdo del entonces alcalde de Los Barrios, Alonso Rojas, con la familia propietaria, en virtud del cual el Consistorio pagó 33.000 euros por la marca y la maquinaria.Ha de recordarse, no obstante, que uno de los principales valedores y promotores de la iniciativa de adquirir para el Ayuntamiento esta fábrica de anisados fue precisamente el Partido Andalucista, de la mano de Jorge Romero, que incluso llevó al pleno de la Corporación una moción en tal sentido estando en la oposición.Destilería Villa de Los Barrios, S.L. cesó su actividad y cerró en 2009 lo que provocó la reacción del PA, con Romero al frente, que en varios medios de comunicación y en repetidas ocasiones criticó y lamentó dicho cierre. Pero –por una de esas ironías o malas pasadas que a veces a los seres humanos depara el destino– la realidad a día de hoy es que los andalucistas llevan cuatro años ocupando la alcaldía y no sólo no han hecho nada por volver a abrir esa vieja fábrica de anisados –a pesar de todo lo que insistieron para que el Ayuntamiento la comprase y la conservase–, sino que, además, han dejado en el olvido lo que queda de ella.Como en otros ámbitos de la gestión, en lo que se refiere a protección, defensa y mantenimiento del patrimonio la labor del equipo de gobierno presidido por Jorge Romero ha dejado y deja mucho que desear. El caso de la destilería Cózar es solo un ejemplo, pero un ejemplo bastante evidente, y pueden traerse a colación algunos más. La situación de la plaza de toros La Montera, a la que no le ha dado ni una mano de pintura en cuatro años, es también prueba de la ineficacia y la dejación en el cuidado de lo público. Como lo es igualmente la pérdida de la nave del recinto ferial o el hecho de que dos de los tres pabellones deportivos existentes en el municipio hayan permanecido y permanezcan cerrados, sin que puedan ser utilizados por los ciudadanos, y el único que está abierto se encuentre en unas condiciones que dan hasta pena.
