El Sierra Luna saca a la calle un nuevo número de su revista

Coincidiendo con el final de curso el IES Sierra Luna ha sacado a la calle un nuevo número de su revista. Tras la que se publicó en el mes de abril, que correspondía al curso pasado y que no pudo publicarse en su fecha por la crisis sanitaria, ésta última quiere recoger el testimonio, desde una óptica escolar, lo que se ha dado en llamar el “curso de la pandemia“.

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Los Barrios

Ello supone un compromiso con la comunidad educativa puesto que con ello esta publicación se pone al día en cuanto a su periodicidad para aspirar a continuar siendo un referente del instituto, recogiendo el quehacer diario de la actividad docente, así como una tribuna donde recoger las inquietudes y ser un vehículo de expresión de profesores, alumnos, padres y en general cualquier persona interesada en los temas educativos. 

Hace poco más de un año nadie podía imaginar lo que se nos venía encima. Palabras como pandemia, confinamiento o estado de alarma no estaba en nuestro vocabulario habitual. Pero durante los meses posteriores nos hemos acostumbrado a vivir en escenarios casi apocalípticos, con las ciudades vacías, entrando de pronto en una dinámica desconocida para todos. Como un mal sueño nos tuvimos que adaptar a estar todo el tiempo en casa y descubrimos lo que era el teletrabajo. El sistema educativo también tuvo que ponerse al día sobre la marcha con la enseñanza telemática.

El curso 2020-21 empezó lleno de dudas en cuanto a la capacidad de la escuela para afrontar la crisis sanitaria que ya se había extendido por todo el planeta. Tuvimos que hacer frente a nuevas olas que llegaban como maldiciones bíblicas, con nuevas renuncias: mascarillas, distancias sociales y cierres perimetrales según las repentinas subidas de las tasas de incidencia. La soledad y la distancia se imponían. Todo ello ponía continuamente a prueba a colegios e institutos. Sin embargo, con protocolos eficaces y el esfuerzo responsable de profesores, alumnos y familias, los centros educativos consiguieron permanecer abiertos consiguiendo atenuar algunos desgarros sociales. Un éxito sin paliativos de todos.

(Ver contenidos) La revista Sierra Luna tampoco cierra. Por el contrario ha querido poner su granito de arena y acudir a su cita anual con la comunidad educativa. Este año incluso por partida doble. Contra viento y marea, con mucho esfuerzo, y coincidiendo con el final de curso, volvemos a salir para recoger la crónica de esta año académico 2020-21 tan decisivo desde numerosas ópticas, puesto que seguimos apostando por la participación de todos.

Este número también se ha tenido que adaptar a las actuales circunstancias y como no podía ser de otra manera refleja la situación de emergencia sanitaria, puesto que muchas de nuestras actividades, que siempre hemos recogido en estas páginas, no han podido celebrarse y en este sentido algunas secciones se han visto afectadas. Pero hemos tenido una entusiasta respuesta de nuestra comunidad educativa que ha nutrido las páginas de la revista con sus colaboraciones.

La revista se abre con la sección de Nuestro Centro, con sus planes y programas, el relato de la adaptación a un nuevo tipo de enseñanza y la despedida a los alumnos de la promoción 2021 que culminaron sus estudios en el Sierra Luna. La sección de Experiencias Didácticas en las aulas abarca un amplio abanico de disciplinas. Asimismo, la habitual sección de Actividades Complementarias y Extraescolares, este curso reducida a las primeras, nos acerca a los aspectos más lúdicos. En las páginas dedicadas a Nuestros Alumnos se he querido dar voz a todos ellos con sus reflexiones. Cultura y creación recoge las inquietudes literarias y las reseñas con su experiencia lectora, junto a algunas colaboraciones destacadas. Deportes se abre con entrevistas a nuestros alumnos deportistas. Finalmente, las reflexiones, siempre interesantes de Opinión. En este número con la participación destacada de Salvador Cruz Artacho, catedrático de Historia Contemporánea de la Universidad de Jaén.

En síntesis, un radiografía completa del día a día de este centro educativo y un rincón abierto a todos, quizás ahora con más razones que nunca, para compartir opiniones, inquietudes y sueños. Porque estamos otra vez en la calle. Y esa es la mejor noticia.

 

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