Seguimos, dicen, a la baja en las incidencias y en el número de contagios. Pero lo que no baja es el número de muertos diarios. Hoy son trescientos cuarenta y siete. Desgraciadamente, ya ni siquiera es primera plana o primera noticia en los informativos. El tema del Consejo de la Radio Televisión Española y el Consejo General del Poder Judicial, se llevan las primeras planas, mejor dicho, el control de esos entes por parte de Gobierno y Oposición. Los muertos han pasado ya a un segundo plano y se nos ofrece una visión casi triunfalista de cómo va bajando esta tercera ola.
Aquí en Andalucía estamos en las vísperas de celebrar (¿Celebrar qué?) el Día de Andalucía que el es el 28 de febrero y cae en domingo por lo que la fiesta para la Comunidad Autónoma Andaluza se pasa al lunes, así que a finales de la próxima semana ya veremos los resultados de este puente inventado. Y, luego, las vacaciones de Semana Santa con lo que estamos preparándonos para la cuarta ola que, según los virólogos, será a finales de marzo.
He comentado las cifras de muertos diarios, pero son las oficiales porque las reales están ya muy cerca de los cien mil. Y el Gobierno y nosotros estamos en otra vía paralela como lo que acabo de leer, incluso, que en Sevilla le han pedido al Gobierno andaluz que quite el toque de queda para la “Madrugá” del Jueves Santo y poder acompañar a sus Titulares (Cuando, además, el Gobierno Andaluz no tiene competencia alguna para quitar o poner toques de queda porque estamos en un Estado de Alarma y solo el Gobierno central puede hacerlo, previo Decreto) … y así nos va. Para todo cristiano entre los que me incluyo, la Semana Santa no se quita, lo que se quitan son las procesiones. Pero la verdadera Semana Santa sigue ahí tan espiritual como tiene que ser.
Con todo esto, quiero decir que estamos en una dinámica rara en la que pretendemos recuperar la antigua normalidad ya porque estamos inmersos en las vacunaciones que es curioso, pero hace seis meses menos del 45% de los españoles querían vacunarse y ahora se están saltando las colas para hacerlo.
En medio de esto, nuestra Ciudad Hermana de Ceuta, no puede vacunar porque no tiene vacunas y han suspendido hasta la próxima semana las vacunaciones, cuando les lleguen. ¿No le da a nadie vergüenza de esto? Un abrazo a toda Ceuta.
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