En una propiedad rural como el Guadacorte de los Hermanos Larios no podía faltar edificios y dependencias rústicas adecuadas a las distintas necesidades rurales o de recreo.
Uno de esos edificios fue el Cortijo construido en 1873, que, entre otras dependencias, contaba con cuadras o caballerizas apropiadas a la alta estima de los Larios hacia el ganado caballar, tan necesario para distraer sus ratos de ocios y sobre todo elemento indispensable para la peculiar cacería del zorro con perros, promovida por la Calpe Hunt de Gibraltar, que tenía en Guadacorte uno de su más habituales lugares de concentración para las batidas de caza por los montes cercanos. Con ello se justifica el dibujo incluido por el autor.
© Dibujos: Antonio Álvarez Vázquez
© Texto: Manuel Álvarez Vázquez