Dos reformas de gobierno en un mes, un jaleo cada semana y un montón de apoyos menos entre los que se cuentan concejales de su propio equipo. La regidora lleva ritmo de récord. Es como si se hubiese propuesto destrozar todas las plusmarcas de ineptitud política.
La alter ego de Alonso Rojas tensa la cuerda de la mano de su predecesor, que dicho sea de paso no tuvo bemoles para aplicar medidas como la de despojar de delegaciones de importancia a sus ediles díscolos, y se está metiendo en un callejón en el que vuelan los puñales y se afilan las cimitarras. Ya veremos si el que se postula como posible gerente del Betis sabe mostrarle la salida o la criatura se le estampa.
Rojas llevó a la quiebra técnica al ayuntamiento y nunca podrá dirigir una empresa que no viva del dinero público y sin tener alrededor gente que le diga por dónde debe tirar, pero en la arena política es un gladiador capaz de gobernar en minoría, con diez concejales sobre veintiuno, y conseguir que se aprueben asuntos tan complejos como el Plan General de Ordenación Urbana y los presupuestos.
Pero Geli Ariza no es Alonso Rojas y puede dilapidar con este nuevo decreto la mayoría que le facilita el apoyo del único concejal de Izquierda Unida. Bastaría con que en algún pleno que trate asuntos de importancia no se presenten los concejales suficientes para conseguir la aprobación. Incluso contando el PSOE con el apoyo del edil del grupo mixto podrían darle un revolcón serio y nada erótico.
De esta nueva situación política que ha disparado el descontento en las filas socialistas se obtienen interesantes conjeturas. La más inmediata es que la alcaldesa, todavía sin carnet, ha hecho caso omiso de la advertencia que le hizo Luís Pizarro para que fuese soltando las delegaciones. ¿Es mejor hacer lo que te pide Pizarro, o lo que le conviene a Alonso Rojas?
Otra es que el ex alcalde quiere mantener el mando en plaza y seguir manejando en la Villa el cotarro político de su partido. ¿Ha retirado la alcaldesa el decretazo a cambio de poder pagar la nómina de julio? Es muy significativo que esta vez haya sido la plantilla de Iniciativas Los Barrios la que ha cobrado primero, sociedad que sigue presidida por Alonso Rojas, aunque los estatutos establecen que el cargo debería recaer en Ángeles Ariza.
También es muy revelador que todavía no se haya renovado el consejo de administración de esa empresa municipal, y es que Rojas sí tiene contactos para solucionar alguna que otra papeleta, pero la agenda de la alcaldesa advenediza debe estar más blanca que el culo de un chino.
Facilitar dinero para la nómina podría ser un buen ardid para controlar en lo posible, y mientras ella se deje, a su sucesora, que no ha sido una buena elección y a la vista está, y con quien ha tenido ya alguna que otra discusión amarga.
En esta hoguera de vanidades y veleidades políticas volvemos a asistir al papel secundario otorgado a los ciudadanos, que presenciamos como convidados de piedra estas intrigas de corte palaciego. Les importamos un rábano y no se cortan en demostrarlo, así que a disfrutar con los navajazos.
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