El concejal delegado de Palmones, José Antonio Gómez, expresó su agradecimiento a los tres veteranos deportistas que han llevado a cabo esta hazaña. “Es digna de admiración vuestra entrega y vuestra capacidad de sacrificio para ayudar a quienes lo necesitan”, señalaba el edil durante el encuentro.
“Nos sentimos muy orgullosos de las asociaciones y entidades benéficas que tenemos en nuestro municipio, y en particular de la asociación ‘Por una sonrisa’. Un colectivo pequeñito, como dice su presidenta, pero a la vez muy grande por la labor humanitaria que realiza. El papel que desempeña el tejido asociativo con el que contamos en nuestra localidad es fundamental para el bienestar y la prosperidad de todos y es, por tanto, más que encomiable”, destacaba, por su parte, David Gil.
“Que en los momentos duros que estamos viviendo existan personas como estos tres corredores que llevan a cabo este tipo de gestas, pensando más en los demás que en sí mismos, merece nuestro reconocimiento y nuestro aplauso”, terminaba concluyendo el concejal popular.
Los ‘BeerMenZ’, así se hacen llamar, son tres audaces malagueños, Francisco Contreras, de Cártama, Manuel Tenllado, de Secadero, y Francisco Viegas, de Marbella, que se dedican a superar grandes retos, como lo ha sido recorrer un millar y medio de kilómetros en unos 20 días, prácticamente con lo puesto, para respaldar y dar repercusión mediática a iniciativas de carácter altruista. En este caso, la lucha contra el cáncer infantil.
Esta carrera, que inicialmente estaba prevista para el pasado mes de abril y que tuvo que suspenderse como consecuencia de la pandemia del covid-19, comenzó el pasado 2 de agosto desde la ciudad francesa de San Juan, en la zona de Los Pirineos. Desde allí los ‘BeerMenZ’ emprendieron su odisea a pie, cruzando la frontera entre Francia y España y atravesando la Península Ibérica de norte a sur, para, después de cubrir unas 20 etapas y recorrer una media de unos 70 kilómetros diarios, acabar su periplo en la población malagueña de Secadero, después de pasar por Palmones y Gibraltar. Como era de esperar, la aventura tuvo un final feliz.