Probablemente no haya una única respuesta para esta pregunta, ya que cada niño tiene sus propias características y cada caso es particular. Pero de un modo general, podemos seguir algunas pistas.
La base para que nuestros hijos rindan con sus obligaciones académicas se sustenta en dos grandes factores:
- La capacidad intelectual, es decir, el CI
- Y la motivación para el estudio
Por ejemplo, un niño con un nivel intelectual normal o ligeramente bajo, con alta motivación, será capaz de sacar buenas notas, mientras que otro con un CI superior a la media, que no esté nada motivado, obtendrá fracasos escolares repetidamente. Por lo que la motivación será el factor más importante a la hora de que nuestros hijos estudien de una manera eficaz y complaciente.
Para motivar a los niños en sus estudios es importante que dispongan de un espacio con su propio material, en una zona silenciosa y sin distracciones. Es conveniente, que, comenzando el curso, el niño ayude a decorar este espacio, lo que le hará sentirse cómodo y a la vez aumentará el compromiso con sus obligaciones.
A partir de aquí se marcarán unos objetivos que se adapten a la realidad de la situación y a las posibilidades del niño. Una vez establecidos los objetivos, preferiblemente a corto plazo (por trimestre), desarrollaremos el plan para conseguirlos:
- Se determinará un horario de estudio
- Nos plantearemos quién va a ser el encargado de dar apoyo o supervisión cuando sea necesario. En este punto hay que aclarar que los más pequeños serán más dependientes, mientras que en los niños mayores debemos fomentar la autonomía, con lo que evitaremos el desarrollo de malos hábitos y cierta dependencia.
- Hay que estar tranquilos y ser pacientes, haciéndoles ver en qué aspectos están mejorando, para que ellos vayan adquiriendo seguridad.
- Y, por último, les ofreceremos un modelo acorde a lo que nosotros les demandamos, haciéndoles ver que no nos rendimos ante las dificultades y que trabajamos con ilusión para conseguir nuestros objetivos.
Si aun siguiendo estas pautas, vemos que nuestros hijos no avanzan, es recomendable consultar con algún especialista, para ver si se trata de algún problema específico de aprendizaje.
Recordemos que para aprender lo principal es querer.
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