La trasnochada aunque recurrente pegada de carteles electorales tuvo lugar anoche como pistoletazo de salida oficial de unas elecciones municipales, dentro de poco más de dos semanas, en la que los partidos ponen su ilusión y los votantes su desánimo. Ya veremos.
Sobre los partidos revolotea, según la tendencia de cada uno, las ganas o no de que la ola negativa que viene del norte afecte a la ciudad. Lógicamente unos estarán encantados con que la ola negativista se extienda y otros rezan para que nos les afecte. Ya veremos.
En todo caso, parece que en la mayor parte de los municipios de la comarca la sombra de los pactos es alargada y casi segura. Y vuelven a entrar ahí los intereses particulares y políticos, aunque sobre todo los primeros. Ya veremos.
En muchos de los municipios, los más importantes, es posible que se necesiten pactos post electorales para poder afrontar cuatro años de gobierno local y poder levantar el vuelo de la crisis que azota a las arcas municipales. Ya veremos.
A priori, y según me han indicado personalmente todos los partidos por lo bajini, en petit comité, of the record, y sin que nadie se entere, o sea, confidencialmente, van a mejorar sus resultados con respecto a los obtenidos hace cuatro años. Ya veremos
Partiendo de esa premisa, de la que todos van a mejorar, o hacemos ayuntamientos dobles o paralelos, o algunos intentan engañarse y engañarnos o a lo mejor es que están una “mijilla” alejados de la realidad de los ciudadanos. Ya veremos.
Y volviendo a la trasnochada pegada de carteles, está pasada de moda, y ya lo que se lleva es el envío masivo de correos con los carteles electorales, la pegada del cartel en el muro de facebook el envío de videos promocionales vía internet. Eso sí lo he visto.
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