Uno de estas Bombas Urbanas Ligeras (BUL) irá destinada al parque de bomberos de Guadacorte.
La inversión global ha sido de 4,5 millones de euros, y ha supuesto un reto tecnológico porque se trataba de transformar un vehículo comercial en un vehículo contraincendios.
Este tipo de pequeños camiones son adecuados para moverse en calles estrechas y contar con equipamiento de primer nivel, como una bomba de agua de mil litros de capacidad.
Los nuevos vehículos cuentan con la última tecnología y con unos niveles de seguridad para los trabajadores y trabajadoras.