En la Casa de la Cultura de la Villa de Los Barrios, organizado por el Ateneo Republicano del Campo de Gibraltar, tuvo lugar ayer tarde, 14 de abril, el acto Homenaje a la República, en el que intervinieron el alcalde de la localidad Alonso Rojas, el alcalde de Puerto Real José Antonio Barroso y el presidente del Ateneo Republicano Germinal Zambrano.
Al acto asistió un centenar de personas pertenecientes a diferentes colectivos de izquierda, así como diferentes miembros de las corporaciones municipales de Los Barrios y Algeciras; encontrándose también entre los asistentes la viuda del alcalde de San Roque recientemente fallecido José Vázquez. Tras una primera intervención del alcalde barreño Alonso Rojas, tomó la palabra Germinal Zambrano, que muy emocionado dio paso a José Antonio Barroso.
El primer edil de Puerto Real, trasser felicitado por su cumpleaños, comenzó su charla con: “Decía Quevedo que donde hay poca justicia tener razón…; y en España habrá poca justicia mientras gobierne el Borbón y no se restaure la República criminalmente derrocada”.
Y Barroso, como hace un año exactamente, volvió a cargar contra la figura de Juan Carlos I: “Este es un proceso político que debe modificarse como un terremoto. Y el terremoto es la derrota del juancarlismo… Que es de naturaleza diferente y más envolvente que la Monarquía. La Monarquía en absoluto es una entidad, una institución prestigiada en este país. Lo es Juan Carlos del que se tiene una visión edulcorada, católica, farsa que nos llega diariamente de las imágenes de televisión. A través de la prensa del papel couché. Una prensa adocenada, sometida, contestada, bovina, genuflexa, falsaria por tanto”.
Así, Barroso también criticó duramente a los medios: “Una prensa que no hace honor a los principios de la libertad de prensa, de la objetividad, sino que lo hace en función de los intereses de los poderes económicos dominantes”.
Y siguió Barroso criticando duramente al monarca: “La naturaleza del régimen monárquico es corrupta. Lo dije hace un año aquí mismo, porque corrupta es su composición. Porque corruptos son sus procederes. El Rey es un hombre afortunado por la fortuna adquirida de manera ilícita en los últimos años”.
Y siguió Barroso: “El Rey hace uso del patrimonio de todos los españoles de manera ilícita. No responde a las exigencias teóricas consustanciales del parlamento, porque éste no procede exigiéndosela. El Rey goza no solamente de la protección de la prensa, de los medios de comunicación, sino de los poderes fácticos. La caída de la Monarquía supondría revisar la relación del Estado con la Iglesia. La Ley electoral. Ayer un columnista del diario El País decía que la Iglesia era un discapacitado democrático profundo; se olvidaba de que conjuntamente con la Iglesia, Juan Carlos I es un discapacitado democrático profundo”.
Barroso también señaló: “El Rey por su procedencia y por su comportamiento es de naturaleza fascista. Hay quien dice que llamando corrupto al Borbón se conculca la Constitución, es mentira. Es la Constitución la que conculca los valores éticos y morales cuando protege al Borbón de sus tropelías frente a la sociedad española… Cuando ese cinturón que protege al Rey lo declare inimputable, inviolable, irresponsable, inatacable y por tanto injuzgable. Evidentemente no es una Constitución democrática cuando la opacidad favorece a su vez todas esas tropelías de este sujeto”.
Barroso también recriminó que “ningún fiscal ni juez se le ha ocurrido llamarlo a capítulo. En esos mismos libros donde se reflejan la amoralidad del Monarca, de su familia. En esos mismos libros donde se cuestionan su papel en el Golpe de Estado. En esos mismos libros donde se dice de su responsabilidad sobre la muerte de su hermano Alfonso. En esos mismos libros donde se habla de la condición licenciosa de su padre, de su madre y de toda su familia”.
Apoyo de Rojas
Por su parte, Alonso Rojas recordó en su discurso la figura del alcalde fallecido de San Roque, José Vázquez, y agradeció la presencia de su familia. Sobre Barroso defendió que el alcalde puertorrealeño “exprese sus opiniones con libertad y que las defienda no sólo con la vehemencia que lo hace sino con la inteligencia que lo hace con las ideas de la república”.