David Galván cierra la temporada 2025 con la sensación de haber dado un paso firme en su trayectoria profesional. Así lo expresa en una entrevista personal que forma parte de la campaña de balance del curso, planteada bajo un original enfoque cinematográfico que invita a mirar el año taurino como si se tratara de una película compuesta de escenas, emociones y silencios.
Lejos del balance triunfalista, el torero gaditano ofrece una mirada serena y autocrítica sobre un año de consolidación, en el que ha logrado reafirmar su concepto y su personalidad en plazas de relevancia. A través de preguntas inspiradas en el imaginario del cine —como “¿qué escena repetirías mil veces?” o “¿cuál eliminarías de la película?”—, Galván construye un relato cercano que permite al aficionado asomarse a su forma de entender la profesión y el momento que atraviesa.
La entrevista pone el acento en la evolución artística del diestro, en su capacidad para aprender de cada comparecencia y en la convicción de que cada temporada es un proceso abierto, una nueva historia por escribir. El 2025 aparece así como un punto de inflexión: un año que no solo suma actuaciones y resultados, sino que refuerza una identidad taurina basada en la sensibilidad, el compromiso y la búsqueda constante de verdad en el ruedo.
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