Redacción | Cádiz
‘Toxiinfecciones alimentarias: un Riesgo real” es el título de la nueva campaña lanzada por los colegios de Veterinarios y Médicos de la provincia. Continúa así la senda iniciada el verano pasado, en el que ambos colectivos gaditanos se unieron para resaltar el papel de estos profesionales en la prevención y protección de la salud de los ciudadanos.
En esta ocasión, la campaña se centra en las toxiinfecciones alimentarias: qué son, cuáles son sus síntomas, qué hacer en caso de notarlos y, sobre todo, cómo prevenirlas. Para ello, con la colaboración de la delegación territorial de Salud de la Junta de Andalucía, los colegios de Médicos y Veterinarios han editado folletos informativos que serán distribuidos desde esta semana en centros de salud públicos y privados, así como en mercados de abasto de la provincia.
Las toxiinfecciones alimentarias son patologías producidas por la ingestión de alimentos contaminados con agentes biológicos o sus toxinas. La Hepatitis A (virus), Salmonelosis (bacterias), Triquinelosis y la Anixakiasis (parásitos) son ejemplos de infecciones alimentarias. El Botulismo y la Gastroenteritis por Enterotoxina Estafilocócica (toxinas) lo son de intoxicaciones alimentarias.
El verano es una época especialmente crítica para el desarrollo de toxiinfecciones alimentarias, ya que las altas temperaturas favorecen el desarrollo de microorganismos. Junto a esto, los habituales cambios en los hábitos alimentarios durante la época estival (viajes, vacaciones, celebraciones…) aumentan el riesgo de padecer estas patologías. Sin embargo, evitarlas es tan fácil como seguir una serie de consejos básicos que se difunden en esta campaña informativa de Veterinarios y Médicos de la provincia:
Comprar los alimentos en establecimientos autorizados.
Extremar la higiene de manos, de los alimentos, de la cocina y utensilios.
Extremar el cuidado en la manipulación de alimentos y separar los crudos de los ya preparados.
Mantener los alimentos a la temperatura indicada en la etiqueta.
Consumir los productos recién cocinados o conservarlos refrigerados.
En estos folletos, la ciudadanía también puede encontrar otras recomendaciones específicas para prevenir Anixaquis, Salmonellas, Hepatitis A y Botulismo:
– Anixaquis:
Consumir pescado siempre cocinado (2 minutos a 60 grados o previamente congelado durante 24 horas a -20 grados).
– Salmonellas, no consumir:
Huevos pasados por agua, mejor cocidos.
Mayonesa casera, mejor de bote, y siempre en frigorífico.
Tortilla poco hecha, mejor cuajada y recién hecha.
Carne de ave poco hecha, mejor bien cocinada y recién hecha.
– Hepatitis A:
Comprar los moluscos vivos y evitar consumirlos crudos.
Limpiar bien frutas y verduras. Desinfectarlas en caso de posible origen contaminado. Utilizar lejía apta para la desinfección de agua de consumo (lejía amarilla), de 10 a 20 ml por cada 10 litros (según concentración). Tras 10 minutos, enjuagar y escurrir.
– Botulismo:
No consumir conservas caseras.
Rechazar toda lata abombada o deformada.
Estos folletos informativos recomiendan acudir al médico en caso de padecer síntomas como dolor intestinal, fiebre, vómitos, diarrea o convulsiones, y contar al especialista qué es lo que se ha comido y dónde se lo consumió.
La información facilitada por el paciente es de suma importancia, porque gracias a ella el médico podrá hacer un diagnóstico y tratamiento adecuados. Pero además, ayudará a prevenir que no enfermen otras personas, ya que con estos datos el servicio de Salud Pública podrá actuar en los establecimientos mediante sus inspectores veterinarios, como garantes de la higiene y seguridad de los alimentos.




