Álvarez ha trasladado a ambos un mensaje de ánimo y optimismo, convencido de que, sin duda, harán un excelente papel en esta prueba ciclista randonneur, no competitiva, que cuenta con casi siete mil inscritos y en la que los participantes deben ser autosuficientes y superar el desafío de cubrir una larga distancia, con salida y llegada en la capital francesa.
París, en efecto, será el punto de partida y la meta de esta cita ciclista, que se celebra cada cuatro años, desde el siglo XIX, con un trazado de 1218 kilómetros, que se han de recorrer en un máximo de 90 horas y que incluye 15 controles de sellado distribuidos por cada una de las etapas de este. La carrera, por un itinerario con un desnivel acumulado de 12.875 metros en su totalidad, arranca el 20 de agosto a las 17:45 horas.
“De cara a esta prueba hay que estar tanto psicológica como físicamente preparado, por la dificultad que entraña. No hay que olvidar que para poder participar en ella se ha de acreditar que el año inmediatamente anterior se ha corrido un número determinado de brevets de 200, 300, 400 y 600 kilómetros, proeza con la que ya han cumplido nuestros dos vecinos que les permite estar en París. Desde aquí, pues, no nos queda otra que hacerles saber que tienen todo nuestro apoyo y les estaremos alentando para que consigan su objetivo”, afirma el concejal delegado de Deportes del Consistorio barreño.
