El objetivo es analizar las consecuencias del consumo de estupefacientes y concienciar a la juventud de que la respuesta ante el consumo de estas sustancias sea inequívocamente un no, además de valorar alternativas de ocio.
Mediante una ponencia los agentes reflejarán todo lo relacionado con la materia adecuada al joven, con anécdotas de la labor policial y enfoque de parte de su trabajo, reforzada con imágenes que muestren la verdadera cara de la droga, una metodología eminentemente práctica y participativa.
La delegada de Educación, Elena Andrades, ha destacado que “las drogas desgraciadamente tarde o temprano pueden llegar a la esfera de decisión del joven, es por ello que se hace necesario que conozcan sus efectos y sus perjuicios que se conciencien de que probarlas es el inicio y que un consumo continuado repercutirá negativamente en su futuro”, añadió.