Los agentes se desplazaron hasta el lugar y comprobaron como el coche estaba rociado de gasolina y preparado para prenderle fuego. Los individuos, una vez llegaron los agentes, se dieron a la fuga.
Durante las comprobaciones de los datos del vehículo, los agentes vieron como el vehículo modelo Rangers Rover había sido robado en su día, además estaba embargado y dado de baja.
Los agentes de la Policía Local llamaron a la Guardia Civil para que iniciara las diligencias oportunas.