Montedeoca calla y no delega

Montedeoca es conocedor de la patata caliente en que se ha convertido la denuncia de La Gertudis, que acarreará próximamente un nuevo traspié en la gestión municipal y política del municipio. El primer edil, con su política suavona ya se ha apresurado a comentar que el no está implicado en el asunto. Si las predicciones se consumen parte de staff socialista del equipo de gobierno actual y de la anterior legislatura se verá afectada judicialmente.

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Redacción | Los Barrios

Ya son varias las voces dentro de grupo municipal socialista que lamenta en privado que el primer mandatario, Juan Montedeoca, no haya dado señales de realizar los nombramientos entre los concejales del equipo de gobierno, PSOE e IU.

Transcurrida unas dos semanas desde la elección del Alcalde de Los Barrios los concejales siguen desempeñando sus cometidos en las mismas delegaciones que delegó la anterior regidora, Ángeles Ariza. Esta espera evidencia que Montedeoca pretende ganar tiempo para intentar complacer a los concejales que han salido reforzado de la crisis pasada en el seno del grupo socialista. Con el añadido de que las concejalas que apoyaron hasta el final a Ariza reclaman para sí mayores competencias.

Independientemente de estos avatares políticos, el de contentar a todas las partes para evitar una nueva crisis en la frágil convivencia entre estos ediles, está que hacer con la concejala y ex alcaldesa, Ángeles Ariza. La situación no es cómoda como puede evidenciarse y la solución tampoco.

A pesar de los problemas internos que el grupo socialista mantiene, estos no han salido a la opinión pública pero de todos es conocidos que la gestión entre los ediles va erosionando la convivencia. De hecho ya han surgidos varios problemas en los que se ha mostrado la variedad de opiniones y discrepancias, de hecho el factor que ha mantenido aglutinado a este grupo ha sido Ángeles Ariza. Temas como la destrucción del bunker de Guadacorte o la firma de un acta de una reunión que no existió, entre otros, están evidenciando las diferencias internas.

Por su parte, la postura de Montedeoca es la de mantenerse al margen. Montedeoca es conocedor de la patata caliente en que se ha convertido la denuncia de La Gertudis, que acarreará próximamente un nuevo traspié en la gestión municipal y política del municipio. El primer edil, con su política suavona ya se ha apresurado a comentar que el no está implicado en el asunto. Si las predicciones se consumen parte de staff socialista del equipo de gobierno actual y de la anterior legislatura se verá afectada judicialmente. Noticia que desde hace un tiempo corre por las redacciones de los medios de comunicación a la espera de su confirmación para su publicación.

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