La felicidad es un término muy amplio y muy complejo, ya que todos somos diferentes y por lo tanto, a cada uno de nosotros nos motiva una determinada cosa.
Actualmente hay muchas personas que dicen no ser felices, y no saben muy bien por qué. Si preguntamos, la mayoría de respuestas van a ir encaminadas hacia el dinero, las relaciones humanas, las cosas materiales, etc.…, es decir, se busca llegar a la meta para ser felices, y no, nos equivocamos al pensar que la felicidad es una meta.
Otro de los errores que solemos cometer y que nos impiden ser feliz es llevar como una carga lo sucedido en el pasado, sobre todo en forma de remordimiento. Es fundamental pasar página, eso sí, aprendiendo de los errores para no volver a cometerlos, y tratando las heridas de una forma sana, porque las “cicatrices no duelen”.
La felicidad está en nosotros mismos, en el día a día, en los pequeños momentos que unidos nos darán ese sentimiento de felicidad. El secreto está en descubrir qué es lo que realmente nos hace felices y buscar en nuestro interior, olvidándonos de aquellas cosas a las que le damos demasiada importancia sin merecerla. Todo es más sencillo de lo que creemos.
Para empezar, debemos querer ser felices, y para ello tenemos que tener en cuenta que nuestros pensamientos son nuestros, y que podemos usarlos como queramos. Párate y recapacita, porque es muy fácil dejarse llevar por las circunstancias que nos rodean. Debemos retirarnos de aquellas influencias que no nos aportan nada, sólo malestar y preocupación, y podremos ver la vida desde otra perspectiva. La felicidad es una actitud, y como tal, depende de nosotros mismos.
En segundo lugar, vamos a aceptarnos. Una vez nos queramos a nosotros mismos, podremos querer a los demás de una manera clara y desinteresada, es decir, de una forma pura que nos hará sentir bien.
Por último, piensa que siempre habrá problemas y que nunca va a existir la felicidad plena, así que no te empeñes en encontrarla. Podemos vivir amargados o por el contrario vivir a tope las experiencias positivas. Hay que ponerle gracia a la vida, y en esto sí que debemos esforzarnos, ya que en nuestras manos está ser feliz.
“El momento apropiado es cualquier momento que aún tenemos la suerte de tener“
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