En el Pleno Municipal del pasado lunes, Rafael Oliva, concejal de Podemos Los Barrios expuso que: “el ahorro de agua debe ser cosa de todos, no solo de la ciudadanía. Nos parece de risa la petición de ARCGISA a los campos de golf de que reduzcan el consumo solo un 25- 30%, es más una medida de maquillaje que algo real, pues supondrá solo una reducción de menos de 1 hectómetro cúbico de los 46 que necesita la comarca anualmente. El consumo humano debe ser una prioridad y, si hay que quitar algo, los lujos deben ser lo primero”.
Oliva hizo alusión a la reciente solicitud de Arcgisa a los 9 campos de golf de la comarca que redujeran su consumo actual entre un 25-30%. “Estamos en sequía excepcional severa”, continúa el concejal, “en virtud de una Orden de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, y solo se permite riego de supervivencia para los campos de golf. Creemos que un 70-75% es bastante más que un mero riego de supervivencia. Además, mientras el golf puede seguir regando casi con normalidad, a los vecinos se les ha prohibido regar su jardín en el último bando del Ayuntamiento de Los Barrios”. Cada campo de golf tiene una extensión media de 70 hectáreas, acaparando entre todos un consumo del 7% del total de la comarca.
Por otra parte, la formación morada considera una incongruencia que al sector de la agricultura solo se les permita consumir el 25% de lo que consumían antes de la sequía y a los campos de golf el 75%. El alcalde de Los Barrios justificó esta decisión alegando que el golf es una actividad económica, pero desde Podemos exponen que la agricultura, además de que también es una actividad económica, produce alimentos que son mucho más importantes que jugar al golf. “Estos problemas”, continúan los morados, “hubieran sido mucho menores si se hubiese empleado la subvención de 7,3 millones de 2021 en arreglar las tuberías de suministro de agua como propuso Podemos, en lugar de gastarlos en comprar cubos de basura. Se habrían ahorrado casi 16 hectómetros cúbicos de agua en vez de desperdiciarlos por el mal estado de las tuberías, lo que nos hubiera dado más margen de actuación. La agricultura y la ciudadanía no estarían sufriendo tanto”.
Para Podemos, se trata de un nuevo ejemplo, ya no de mala gestión, sino de la despreocupación más absoluta: “se enteraron de que tenían una subvención de 7,3 millones a mitad de año y dijeron que ya no les daba tiempo a gestionar las reparaciones de las tuberías porque había que gastarla antes de que finalizara el ejercicio, por eso se gastaron todo el dinero en contenedores y camiones de basura”. En lo que respecta a la industria, que consume el 35% del agua de la comarca, la formación de izquierdas todavía está esperando a conocer qué medidas se han tomado para el ahorro. “Sabemos que los vecinos no pueden baldear los patios ni regar el jardín”, explican los morados, “pero desconocemos qué ha hecho la industria para reducir el consumo. También conocemos que la industria de la comarca dispone de plantas desaladoras que podrían emplearse en dar servicio, esa sería una buena forma de ayudar”.
Por último, estiman que no se debe dejar el suministro de agua a la providencia de que llueva o deje de llover, es necesario planificar actuaciones que garanticen el suministro. “Hay medios, hay tecnología, hay subvenciones, lo que no hay son ganas de solucionar un problema que va a seguir creciendo cada año”, finalizan.
