Rafael Fenoy Rico | Secretario de Comunicación Educación de la Confederación General del Trabajo (CGT)
Con el Brexit a cuestas, bien merece la pena recordar el triste momento en el que miles de trabajadores y trabajadoras campo gibraltareños perdieron su trabajo en Gibraltar. Una buena fuente para evocar el momento histórico son las notas de prensa emitidas por Pyresa, (Periódicos y Revistas Españolas. Servicio de Agencia), creada en 1945 para la cadena de Prensa del Movimiento, que distribuía noticias a los más de 40 diarios de la Prensa del Movimiento, así como otros medios ideológicamente afines al régimen de Franco.
El diario Informaciones de 9 de julio de 1969 informaba de que, a las 10,30 de la noche anterior, el cierre definitivo de la frontera con Gibraltar era efectivo. En ese relato se informaba de que “Normalmente el número de personas que acudían a trabajar a Gibraltar era de unas cuatro mil quinientas”.
Ya el diario Pueblo el 7 de junio de ese año recogía las palabras pronunciadas en una reunión celebrada en la Línea de la Concepción en la que se prometía que “Para los obreros españoles se arbitrará la ayuda necesaria. Se concederán jubilaciones anticipadas a todos aquellos que lo deseen, siempre que alcancen la edad necesaria; se organizarán cursos de formación profesional y se abonarán dos meses completos de sueldo, a lo cual seguirá la concesión de seguro de desempleo equivalente al sueldo real percibido hasta ahora. También a partir de hoy quedará suprimido el punto habilitado de tercera clase en La Línea de la Concepción, según una orden del Ministerio de Hacienda que publica el «Boletín Oficial del Estado»”. Esa orden de 4 de octubre de 1966 creaba ese puesto fronterizo provisionalmente y la nueva lo suprime “quedando prohibida toda clase de tránsito a través del mismo”
Son ilustrativas del pasado y sugerentes para el presente las palabras de despedida de Álvarez Abellán, Presidente del Consejo Nacional de Trabajadores, del sindicato Vertical de Franco, en el acto celebrado en la Línea en junio del 69: “Y nada más. No hemos de ignorar que el quehacer es duro, la labor ardua, pero con hombres de vuestro temple, unidos en nuestra organización sindical, tengo que expresar aquí mi confianza y mi seguridad en vuestro futuro, en el de vuestras familias y en definitiva en el de esta tierra que por sufrida es tan española”
Más claro agua. La historia nos ha enseñado que las promesas se las lleva el viento y de que el que avisa no es traidor. Así que, sufrido pueblo, si llega el Brexit y se cierra la verja toca… que por eso somos españoles.
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