Nos encontramos en las mismas condiciones que en marzo. En realidad, estamos peor porque nos da lo mismo ocho que ochenta.
Por ejemplo, los muertos por coronavirus el pasado 19 de marzo cuando ya estábamos confinados en nuestros domicilios, fueron 228. Eso nos dijeron. Después, hemos descubierto con el tiempo, que eran más.
La diferencia está en que el 19 de marzo al saber teníamos 228 muertos en un solo día, sabíamos que la tragedia era inmensa. Ahora, nos dicen que tenemos 270 muertos en las últimas veinticuatro horas y nos vamos de fiesta o de botellona a pasear por el centro de la ciudad. Estamos perdiendo el sentido de lo que tenemos encima.
Si seguimos de esta manera, el año 2020 se va a quedar corto con lo que nos puede pasar en el 2021. Si no actuamos con verdadera responsabilidad y solidaridad, vamos a seguir igual o peor. Y hablo de responsabilidad y sobre todo de solidaridad, si, solidaridad con los demás. Si no llevo mascarilla o no cumplo con las normas, estoy afectando o pudiendo infectar a los demás. Así que esos que te miran de mala manera porque le dices que se coloquen las mascarillas están actuando de manera totalmente insolidaria por no darles un calificativo más fuerte.
Por lo demás, el paro sigue disparado. Y seguirá disparándose porque los ERTE se convertirán en ERE. Y con los datos de estos días, no se podrá salvar la Navidad, sino que esta será desastrosa. El Gobierno está retrasando todo lo posible el paso de ERTE a ERE, pero esto es inevitable y estamos hablando de miles y miles de personas. Los autónomos que están pasando dificultades, llegarán a final de año totalmente exhaustos y con poquísimas posibilidades de seguir adelante. Taxistas, músicos, actores, actrices, llevan sufriendo ya nueve meses, pero todo tiene un límite.
A España no la cambia ni la madre que la parió, que diría Alfonso Guerra. Estamos, además, en manos de incapaces que solo quieren mantener lo que hay para aguantar el mayor tiempo posible en el poder.
Otro problema es el de las vacunas. Quizás lleguen en diciembre, cosa que dudo, pero si llegan, las dosis no serán suficientes para cubrir todas las necesidades. En el primer semestre de 2021 puede que se pueda vacunar al grueso de la población. Pero seguiremos sin cura. La gente seguirá muriendo de coronavirus como nos ocurre con la gripe. La vacuna será un alivio, pero no será la solución final al problema ya que el coronavirus se convertirá en estacional por lo que, si no se actúa con rapidez, el 2020 puede quedarse pequeño comparado con el 2021. Y tiene toda la pinta de ser así.
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