El estado del malestar se consigue cuando uno está molesto, ni más mi menos, y ese estar molesto puede ser debido a múltiples factores, entre ellos: por decisiones políticas, por no pagar a su debido tiempo, por no contar con infraestructuras adecuadas para desempeñar su trabajo, por los recortes salariales, por la subida del Euribor, por la caída de la bolsa, por la ganancia de los bancos, por la pérdida de poder adquisitivo, por la falta de una democracia real, por cambiar la Constitución, de buenas a primeras , sin contar con el respaldo del pueblo, y un gran número de etcéteras.
Esta piel de toro llamada España sufre una crisis tremenda en todos los sentidos: política, económica, social, cultura. Hemos pasado de los años de bonanza y de codearnos con la “champion League” de los países más avanzados , a convertirnos en simples marionetas al antojo de Bruselas y , por supuesto, de los grandes, Alemania y Francia.
Y esto no sólo ocurre en nuestro querido país sino también en otros de la zona “Euro” como Grecia, Portugal e Irlanda, entre otros.
La gente está quemada, por supuesto, hay casi cinco millones de parados, cada vez existen menos empresarios, el dinero no sale de los bancos para dar créditos, se han cargado a la pequeña y mediana empresa y todo está politizado- si no que se lo pregunten a Jorge Romero, alcalde de Los Barrios.
En el Magreb surgen elementos armados llamados insurgentes que están cargándose a los dictadores que ya llevan demasiado tiempo comiendo del pueblo, parásitos sociales, con un status especial y con más dinero que ideas. Eso es “son tan pobres que lo único que tienen es dinero”.
Y en España surge un movimiento pacífico llamado el 15 M que está y dará, estoy seguro de ello, mucho que hablar. Porque es el pueblo el que pide soluciones, los miles de parados y los padres que no ven futuro para sus hijos, y los jóvenes que son conscientes de que la clase política no es capaz de hacer nada para cambiar esta molesta situación.
Estamos en “Estado de Malestar”· y lo peor de todo es que no hay Gelocatil, ni Ibuprofeno. Hay señores que ganan sueldos estratosféricos y la gran mayoría que si no es por Cáritas y los comedores sociales no tienen ni para comer, o para llegar a fin de mes. Las pagas son ridículas. Qué hace un padre de familia con tan sólo 400 euros al mes para llevar la casa. Y encima que tenga que pagar alquiler o hipoteca, no lo entiendo. Los ricos son más ricos y los pobres más pobres. Se han cargado a la clase media, si no a toda a gran parte de ella.
En este estado, “yo estoy muy malito”
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