Técnicos del Área de Medio Ambiente de Los Barrios participan en las jornadas sobre contaminación lumínica

El Ayuntamiento ha iniciado los trabajos para realizar un programa de adaptación de las instalaciones de alumbrado exterior para el cumplimiento de los niveles de iluminación legalmente establecidos


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Técnicos del Área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Los Barrios, que dirige el concejal Miguel Alconchel, han participado en las jornadas que sobre contaminación lumínica, se ha celebrado en Alcalá de los Gazules.

El programa de las jornadas ha contado, entre sus contenidos, una charla- coloquio con la participación de expertos en contaminación lumínica y empresas del sector, con un enfoque eminentemente práctico, en el que se realizaba un análisis sobre la aplicación del “Reglamento para la protección de la calidad del cielo nocturno frente a la contaminación lumínica y el establecimiento de medidas de ahorro y eficiencia energética”.

Este Reglamento establece la obligación que tienen los Ayuntamientos de realizar en sus municipios una zonificación lumínica del mismo, al objeto de establecer unos niveles de iluminación adecuados a los usos y necesidades de dicha zona.

En este sentido, el Área de Medio Ambiente y Urbanismo del Ayuntamiento de Los Barrios ha iniciado los trabajos para un programa de adaptación de las instalaciones de alumbrado exterior para el cumplimiento de los niveles de iluminación legalmente establecidos.

Para abordar este estudio, el municipio de Los Barrios cuenta con un Plan de Optimización Energética que hace un estudio detallado de las instalaciones de alumbrado público exterior pertenecientes al Ayuntamiento.

Asimismo, se han iniciado los trámites para la adhesión a diferentes líneas de ayuda para el cambio de luminarias a otras más eficientes y menos contaminantes, ya que una mala iluminación es sinónimo de derroche energético, emisión de gases de efec­to invernadero y costes económicos innecesarios.

La contaminación lumínica tiene efectos negativos de muy diversa índole, afecta a las observaciones astronómicas y a la consiguiente perdida de patrimonio cultural y al desarrollo natural de los ecosistemas. Por otro lado, la invasión de luz artificial en zonas que no se desea iluminar, tales como viviendas o espacios naturales, genera molestias a las personas y demás seres vivos que en ellas habitan y a la salud de las per­sonas que se manifiestan como alteraciones del sueño, trastornos emocionales e incluso otras enfermedades más graves.

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