NOVENA PROVINCIA

Blas Infante


 

Hace poco más de un siglo, Andalucía no existía oficialmente. Las voces de Andalucía y los andaluces, sólo existían en el lenguaje de la calle y en algunas referencias literarias. Y nuestra historia está llena de tópicos y de mitos. Ha sido, como se dice ahora, intoxicada. Para nosotros da lo mismo que esa mitología haya sido llevada a cabo de forma consciente ó de manera totalmente inconsciente. El caso es que existe y que somos los andaluces los que padecemos las consecuencias.

Y a estas alturas, todavía quieren meternos con calzador, que todo empezó un cuatro de Diciembre de 1977, cuando casi cien años antes ya se plasmó, en 1883, el primer proyecto de Estatuto de Autonomía, la Constitución de Antequera.

A partir de entonces, la lucha por la autonomía ha sido una constante en nuestra tierra, incluso en los periodos más negros como la propia dictadura franquista.

Por tanto, es necesario insistir en que la realidad andaluza es antigua, aunque en un momento se truncara por la violencia de fuerzas extrañas.

Al-Ándalus, por reducción al absurdo, existió porque dejó de existir. Porque dejaron de existir un pueblo, una cultura y una civilización en su estado libre.

Y Al-Ándalus existió y existe porque continuaron existiendo un pueblo, una cultura y unos restos civilizadores.

Y porque, a pesar de todo, Andalucía siguió y sigue siendo distinta. Para mal y para bien. A pesar de todo.

Y hoy, cuando se han superado esas mil trampas que nos han puesto en el camino, pero dejándonos jirones muy importantes de nosotros mismos en cada una de ellas, tenemos que decir, como el propio pensamiento de Blas Infante así lo transmitía: A pesar de todo.

“Los que hacen de la política una profesión exclusiva y excluyente, hablan de conflictos entre ideas y realidades. La diferencia entre ellos y nosotros es esta: para ellos, las realidades de un país son los intereses creados. Para nosotros, los dolores creados por esos intereses”.

Andalucía no es un espacio geográfico, ni sólo una zona económicamente periférica y dependiente. Andalucía es una colectividad humana con características socioculturales específicas que la diferencian de otras colectividades. Andalucía es, en sentido antropológico, un pueblo.

Desde el rechazo del esencialismo. Y aunque Andalucía pueda reclamar el poseer las raíces histórico- culturales más antiguas de la Península Ibérica, como cualquier otro pueblo, el andaluz es producto de la historia, pero de un proceso histórico particular y propio.

Noticias de la Villa y su empresa editora Publimarkplus, S.L., no se hacen responsables de las opiniones realizadas por sus colaboradores, ni tiene porqué compartirlas necesariamente.

Noticias relacionadas

 
18 marzo 2025 | José Antonio Hernández Guerrero
Jugar para seguir aprendiendo y disfrutando durante toda la vida
 
18 marzo 2025 | Patricio González García
La amistad
 
18 marzo 2025 | Rafael Fenoy Rico
Una encuesta para la APBA cuestionada