Iahadih Sidi Mahamud Bueha | Miembro del Consejo Ciudadano de Podemos
Los ciudadanos sienten desconfianza y apatía hacia la política y los políticos de turno por el poco interés que estos muestran por los problemas de los ciudadanos. Además, la multitud de casos de corrupción y malversación de fondos públicos, que cuestionan la credibilidad de los representantes públicos, aumentan esa apatía. Y los políticos sólo se acuerdan de ellos cuando se aproximan las elecciones municipales, autonómicas o nacionales y saben que necesitan los votos de la ciudadanía; es entonces cuando se les ve por las calles, en las barriadas, en los parques y jardines y cerca de los lugares públicos, saludando y sonriendo de oreja a oreja.
Después de tres año y medios de mandato municipal del equipo de gobierno PA-PP en Los Barrios, hay que señalar todo tipo de deficiencias y negligencias en la gestión de los bienes públicos: abandono de la limpieza e higiene de los colegios, parques y jardines, suciedad en todas las barriadas, asfalto deteriorado y con grandes baches en buen número de calles, e inseguridad ciudadana en algunas barriadas. Todo esto se debe a la falta de personal que tiene el Ayuntamiento para el mantenimiento de estos servicios, lo que es fruto del despido improcedente e injusto de los trabajadores municipales decidido arbitrariamente por el alcalde en complicidad con sus concejales.
La privatización de los servicios de limpieza y electricidad llevada a cabo por la coalición PA-PP no solucionó los problemas de la limpieza ni acabó con los cortes de luz, sino que aumentó más la precariedad de los servicios, el descontento de los ciudadanos y la protesta de algunos centros educativos.
El equipo de gobierno local habla frecuentemente de la participación de los ciudadanos en cuestiones que conciernen a su municipio. Pero la realidad es otra: ¿Fueron los ciudadanos consultados para la privatización de los servicios de limpieza y electricidad? No
¿Acaso los ciudadanos no son soberanos para ser consultados de forma directa para decidir sobre aquellos asuntos de suma importancia, sobre todo cuando comprometen el patrimonio y la gestión de los servicios públicos durante diez y veinte años? ¿Fueron los barreños/as consultados por la coalición PA-PP para vender una parcela de suelo municipal a Carmín por un millón seiscientos mil euros y para poner otra más en venta? ¿Se les ha preguntado a los ciudadanos cuál va a ser el destino de éste dinero? ¿O se destinará a las familias más necesitadas, los niños desnutridos o a aquellos que no tienen para pagar las hipotecas¿? ¿Quizás al arreglo de nuestra calle principal, la calle La Plata, que da vergüenza cruzarla por la suciedad que presenta y eso que es el paso diario de nuestros políticos? ¿O el destino será otro que los ciudadanos ignoramos? Esperemos que no sea para utilizarlo de forma partidista en el maquillaje de la ciudad y su gestión y para pagar la propaganda del equipo de gobierno de cara a las próximas elecciones.
¿Saben los ciudadanos que esta legislatura 2011-2015 fue la más conflictiva en sus plenos, caracterizados por la falta de respeto y los enfrentamientos? ¿Saben los ciudadanos cuáles son los costes de los juicios que enfrentan al ayuntamiento con los trabajadores despedidos de forma injusta? Lo que es seguro es que ese coste será muy elevado para las arcas públicas.
Los ciudadanos, con su participación efectiva, constante y dinámica en los asuntos de sus municipios son los únicos que pueden producir los cambios en la gestión política, económica y social para garantizar la calidad de vida y el bienestar de la mayoría, a través de la transparencia, la eficiencia y la eficacia en la gestión de lo público. Los ciudadanos son soberanos para elegir a sus representantes directamente en asambleas y exigirles el rendimiento de cuentas para que puedan contar con su confianza durante el tiempo de representación.
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