Rafael Moll | Periodista
Intento desde hace tiempo recordar las nuevas infraestructuras que ha creado en Los Barrios el dúo Partido Andalucista- Partido Popular. Pero no encuentro ninguna. En estos cuatro años lo que más se le parece a una obra es el empeño que tuvo Romero en quitarnos una rotonda para ponernos otra infinitamente más fea. No ha existido nada que nos haga recordar estos cuatro años de Gobierno en positivo. El alcalde se ha dedicado a decir lo malos que eran los de antes y sin embargo no ha sido capaz de dotar a los barreños ni de un nuevo edificio, creado por Romero y Gil.
El asunto es más grave aún. No ha desarrollado el más mínimo mantenimiento de recintos que eran ejemplares en Los Barrios. Creados por ‘los malos socialistas’, según Romero. El viernes me tomaba un café en el bar que se encuentra en el mismo parque de Palmones. Allí pude comprobar como está el mismo, que hace cuatro años fue objeto de una importantísima distinción en Zaragoza. Columpios destrozados, el corcho del suelo prácticamente desaparecido, suciedad por todos lados y encima un mal olor insoportable de las arquetas del suelo. Claro si se acumula la basura, es normal que al final acabe oliendo.
Pero ese parque es una señal de lo que ha sido el destrozo generalizado que han sufrido los barreños en sus edificios. Por no hacer Romero no ha cambiado ni el suelo de la Plaza de la Constitución, que tanto criticó el, ni ha reformado ninguna de las grandes zonas clave de la localidad. Y lo que ha hecho, más vale que lo hubiese dejado como estaba, como es el caso de la Avenida de José Chamizo. Piedras, moqueta (que no césped artificial) y cipreses, es el panorama que nos ha dejado. Será porque es verdad que este pueblo empieza a morir como sociedad con su gestión. Siguiendo con esa tónica lúgubre, quejas con los últimos bancos instalados en Los Barrios, apenas sin respaldo para descansar, que digo yo que es lo principal que ha de tener un banco, y con síntomas de ser incómodos. Como un ataúd.
Romero tiró el edificio del recinto ferial y allí ¿qué tenemos ahora?… nada. Ya no voy a hablar del Palacio de Congresos que prometió en Los Barrios, hablo de lo más elemental. Cuidar lo que había, cosa que no se ha hecho. Capítulo aparte tienen las instalaciones deportivas. Dejadas a su suerte. Al San Rafael le ha puesto césped nuevo para la U.D.Los Barrios, pero se ve que para el alcalde los niños de Palmones y Los Cortijillos no juegan al fútbol. Ha olvidado totalmente a los dos clubes de estas barriadas. Si a esto se suma la suciedad absoluta en la que se encuentra sumido Los Barrios, entonces se puede llegar a entender el ánimo bajo por el que pasa esta localidad. Todo está peor que hace cuatro años, incluidas las finanzas municipales, que tienen en el horizonte el pago a los trabajadores despedidos por el alcalde y que, le guste o no, tendrá que abonar. ¿Cuál será el legado de la gestión de Romero? El paro creado en Los Barrios, la suciedad de sus calles y las aceras rotas. No es poco.
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